Curiosidades sobre los rótulos luminosos de neón

rótulos luminosos

Aunque son muchos los sistemas de rotulación que existen para darle visibilidad y publicidad a los diferentes tipos de negocios, hay que tener claro que los rótulos luminosos de neón son un verdadero referente. Y lo son porque traen consigo una larga lista de ventajas, tales como un precio económico o un atractivo innegable.

Rótulos luminosos atractivos

En numerosos artículos de Visual Sign te hemos hablado de esos sistemas, pero ahora lo que queremos darte a conocer son algunas de las curiosidades más relevantes que existen sobre los mismos. Nos estamos refiriendo a varias particularidades como estas:

  • El neón es un gas incoloro que se descubrió en el año 1898 por los químicos británicos Morris W. Travers y William Ramsay. Le pusieron ese nombre porque es una palabra griega que significa “nuevo”.

  • El origen de esos luminosos se encuentra a principios del siglo XX. En concreto, fue en el año 1910 cuando apareció el primer rótulo de ese tipo creado por el físico y químico francés Georges Claude (1870 – 1960). En concreto, le dio forma para poder presentarlo en el París Motor Show.

  • En 1923 el citado inventor creó y vendió dos de esos sistemas a un vendedor de automóviles de Estados Unidos. Y eso propició que rápidamente los mismos se solicitaran de forma masiva en todo el país.

  • Uno de los lugares del mundo donde más se ha utilizado y se sigue utilizando el rótulo de neón es en la Plaza de Times Square de Londres.

  • Los luminosos de este tipo se han convertido en parte emblemática de la arquitectura y la esencia urbana de muchas ciudades. De ahí que algunos hayan pasado a ser calificados como históricos. Entre estos podemos destacar, por ejemplo, el de Tío Pepe en Madrid o el de Valdivieso en Santiago de Chile.

  • El mundo del cine cuenta con escenas emblemáticas que giran en torno a un sistema de rotulación como el que nos ocupa. Este sería el caso, por ejemplo, de la escena con el rótulo de Schweppes que aparece en el filme “El día de la bestia” (1995) de Álex de la Iglesia. Sistema que está situado a 37 metros de altura, que pesa 100 kilos y que cuenta con unas dimensiones de 10,65 x 9,36 metros.

  • Variando la presión del citado gas dentro de un tubo se pueden conseguir hasta trece colores diferentes.